El taquión del Árbol de la Vida, en su forma tridimensional como un colgante de chakra, es un símbolo ancestral que activa el potencial interior y facilita la clarificación en diferentes niveles, ayudando a manifestar soluciones rápidamente. Elegido intuitivamente por personas desequilibradas o propensas a estancarse, así como por aquellos con tendencias introspectivas, reconecta con lo positivo de la vida material y despierta el potencial del pasado, presente y futuro.

Recomendado para llevarlo durante el día a la altura del plexo solar, este colgante puede integrarse en el Feng Shui para revitalizar áreas con baja energía. Desde una perspectiva de equilibrio energético, estimula el flujo de meridianos y la frecuencia celular. Hecho a mano con silicio cristalino puro, cada colgante es único y su proceso de fabricación se considera una fusión de magia y alquimia.

Este taquión se destaca por ser especialmente útil en una variedad de situaciones vitales como:

• En caso de heridas emocionales
• Dejar atrás el pasado y empezar de nuevo
• Al contener la preocupación y la ira
• Cuando uno es incapaz de pedir ayuda a los demás
• En caso de trastornos cardíacos o infecciones respiratorias
• Si soy torpe por el peso de mis preocupaciones